En este preciso momento sigue habiendo un exceso de oferta grande
Pocas veces la OPEP plus ha cumplido al 100% con los recortes anunciados
Tras un acuerdo histórico de la OPEP y sus aliados para recortar la producción (alrededor de un 10% de la oferta global), lo normal sería ver grandes subidas en los precios del petróleo. Sin embargo, no solo no se están produciendo grandes subidas, sino que el crudo de tipo Brent, de referencia en Europa, ha llegado a caer un 2% en los mercados de futuros, poniendo en peligro la zona de los 30 euros por barril. La explicación a este contradictorio movimiento se puede desagregar en dos factores: por un lado, el mercado había descontado este recorte (o incluso uno mayor) durante la semana pasada con subidas intensas. Por otro, el bicho y su impacto en la economía avanza mucho más deprisa que las tediosas negociaciones entre los países del cártel petrolero. Este recorte de 9,7 millones de barriles por día se negoció sobre un escenario en el que la demanda global caía entre 15 y 20 millones de barriles por día. Ahora, se empiezan a contemplar escenarios en los que la demanda se reduzca entre los 20 y los 35 millones por día.
I-N-G: "Aunque estos recortes son significativos, todavía se espera un superávit considerable durante el segundo trimestre. Por lo tanto, todavía creemos que existe un riesgo a la baja para los precios del petróleo en el corto plazo"
Por ello, en este preciso momento, el histórico recorte parece insuficiente para que el crudo 'reviva' en el muy corto plazo. Sin embargo, a largo plazo y suponiendo que se recupere cierta normalidad en la actividad económica, sí podría ser suficiente para que los precios suban con fuerza en la segunda mitad del año.
Pese a que la guerra de precios y de producción entre Arabia Saudí y Rusia había agravado la situación, el gran problema para el petróleo sigue siendo la debacle de la demanda. De modo que un recorte que en tiempos normales habría disparado el precio del petróleo, probablemente, llevando el barril hasta los 100 dólares, en la actualidad ha quedado como un movimiento para evitar el colapso total de los precios en el corto plazo e impedir que las infraestructuras que almacenan el crudo alcancen su capacidad máxima.
Warren Patterson, analista de materias primas en I-N-G, explica en una nota que "aunque estos recortes son significativos, todavía se espera un superávit considerable durante el segundo trimestre. Por lo tanto, todavía creemos que existe un riesgo a la baja para los precios del petróleo en el corto plazo desde los niveles actuales". Los panelistas del banco holandés creen que el precio medio del crudo durante este trimestre será aún de 25 dólares por barril.
La segunda mitad del año puede ser otra historia... siempre y cuando la demanda se recupere
Dado el tamaño de los recortes, junto con las caídas orgánicas de otros productores que no pueden sobrevivir con estos precios tan bajos (como es el caso de el fracking de EEUU o las arenas bituminosas de Canadá), las perspectivas para los precios durante la segunda parte del año ahora parecen más constructivas. "Este sería el caso si asumimos una recuperación de la demanda durante la última parte del año. Estos factores deberían ayudar a reducir los inventarios de petróleo a medida que nos adentramos en la segunda mitad del año y, en consecuencia, hemos revisado al alza nuestros precios para el Brent para el tercer trimestre de 2020 esperamos unos 37 dólares por barril, mientras que nuestro pronóstico del cuarto trimestre ha subido en cinco dólares hasta los 50 por cada barril".
Ann-Louise Hittle, vicepresidenta Wood Mackenzie, "espera que el segundo semestre de 2020 muestre una reducción de los inventarios, en contraste con el exceso de oferta récord del primer semestre de 2020. Eso respaldará y elevará los precios significativamente. El mercado reconocerá esto una vez que el almacenamiento se desacelere este trimestre y comience a disminuir en la segunda mitad".
No obstante, siguen existiendo claros riesgos que dependen de la evolución de la crisis y las decisiones que tomen los gobiernos al respecto. "Claramente, la demanda sigue siendo una incertidumbre y un riesgo clave para este punto de vista. Si las restricciones sobre los viajes y los confinamientos continúan en el segundo semestre del año, esto probablemente reduciría la recuperación de la demanda para la última parte de este año", advierte Patterson.
Los riesgos no son pocos cuando se trata de un anuncio de la OPEP y sus aliados. Cada país tiene sus problemas internos para cuadrar ingresos y gasto público, lo que en ocasiones lleva a que algunos países decidan producir por encima de la cuota acordada. Siempre ha existido el problema del cumplimiento de la OPEP con sus propios recortes. El grupo ha acordado una reducción histórica de la producción, "pero ahora tenemos que ver si ellos se ajustan a lo anunciado. A diferencia de los acuerdos anteriores, será difícil ver a Arabia Saudí reduciendo la producción por encima de su cuota (2,5 millones de barriles por día) para compensar las deficiencias de otros, dado el elevado peso que ya tiene que asumir el reino", sentencia el experto de I-N-G.
No hay comentarios:
Publicar un comentario