Según publica este domingo el sitio de noticias Axios, el mandatario estadounidense y candidato republicano en las elecciones del 3 de noviembre, Donald Trump, planea declararse vencedor prematuramente ese mismo martes por la noche, si ve que está “por delante” de su contrincante, el demócrata Joseph Biden, incluso si todavía el Colegio Electoral no hubiese terminado el recuento de votos en estados clave como Pensilvania.
El mandatario ha discutido en privado con personas de su confianza los detalles del posible escenario del 3 de noviembre, declararon a Axios tres individuos familiarizados con el asunto, quienes describieron con detalle los planes de Trump para subir al podio la noche de las elecciones y declararse ganador.
Para que esto suceda, sus aliados esperan que Trump gane o lidere en Ohio, Florida, Carolina del Norte, Texas, Iowa, Arizona y Georgia.
El equipo de Trump se está preparando para afirmar falsamente que las boletas por correo contadas después del 3 de noviembre —un conteo legítimo que se espera favorezca a los demócratas— son evidencia de fraude electoral.
Muchos pronósticos indican que, en la noche de las elecciones, es probable que Trump lidere en Pensilvania, aunque el resultado final de este estado podría cambiar sustancialmente a medida que se cuenten las boletas por correo en los días siguientes, señala el medio.
Por ley, muchos estados no pueden comenzar a contar los votos hasta el día de las elecciones y, con tanto correo en las boletas, algunos estados tardarán días, quizás semanas, en contar todo el correo en las boletas. Se espera que esas papeletas favorezcan en gran medida a los demócratas.
El martes que viene, los estadounidenses deciden su futuro en unas elecciones históricas, que transcurren en medio de una crisis provocada por la pandemia del nuevo bicho y dudas sobre un posible fraude.
Un número récord de 84 millones de estadounidenses ya ha sufragado de manera anticipada. Las encuestas arrojan que Biden lidera por varios puntos el voto popular, pero la elección finalmente se decidirá mediante los resultados estatales, que impulsan el Colegio Electoral.
Diferentes expertos advierten que, si Trump no sale reelegido en la próxima cita electoral de EEUU, existe un creciente riesgo a una guerra civil y un golpe de Estado de grupos armados de extrema derecha cercanos a Trump.
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