jueves, 14 de abril de 2022

Ucranianos hunden buque insignia de la flota rusa del mar negro, el Moskvá

 Según autoridades ucranianas, el buque ha sido atacado con sistemas antibuque costeros equipados con misiles Neptuno frente a las costas del puerto ucraniano de Odessa. 

Aun no se confirma el hundimiento definitivo del buque, pero si se ha reconocido por parte del gobierno ruso que el barco ha sufrido graves daños luego que la munición en el buque haya detonado; no confirman que el navío haya sido atacado con misiles, pero sí que el buque quedó inutilizable y que toda la tripulación ya fue evacuada. Las autoridades rusas manejan que la causa del incendio, y posterior detonación de la munición, es desconocida. 

No hay imágenes actualizadas del incidente, pero en lo personal, yo sí creo que el buque fue atacado con algún tipo de arma, muy probablemente con misiles antibuque, pero NO del tipo Neptuno como afirman los militares ucranianos, sino con misiles de algún otro tipo. 

En primer lugar, el sistema de defensa costero ucraniano Neptuno aún no estaba terminado; es decir, aún no se producía en serie y solo se disponía de prototipos con un cierto grado de desarrollo; y eso tan solo el año pasado, pues las últimas pruebas de los misiles Neptuno, que aún estaban en desarrollo (se trataba de misiles de preserie) se realizaron precisamente la segunda mitad del año pasado. 

El gobierno ucraniano supuestamente había realizado el contrato para la compra de tres divisiones de sistemas de defensa costera Neptuno, sin embargo, dichos sistemas serían suministrados precisamente a inicios del presente año, con lo cual la afirmación de que el responsable del hundimiento del buque ruso haya sido e sistema Neptuno es muy difícil de aceptar. 

Y lo digo porque si fuera cierto que los sistemas Neptuno ya estuvieran en servicio de las fuerzas armadas de ucrania, con toda seguridad la inteligencia rusa ya lo habría sabido y, entonces, no hubieran dejado sus buques a distancia de tiro para los misiles Neptuno en caso de haber estado ya operativos antes del inicio de la operación militar de rusia en ucrania (y suponiendo que no hayan sido destruidos ya). 

Se supone que el alcance máximo de los sistemas de misiles antibuque Neptuno es de 250 a 300 kilómetros, contando con un sistema de navegación inercial con radar activo (el cual se activa en la fase final). Tiene un peso de 870 kilogramos, de los cuales 150kg corresponden a su ojiva de alto explosivo.  Asimismo, El R-360 Neptune es un misil crucero antibuque superficie-superficie cuyo diseño está basado en el Kh-35U ruso. Su versión de defensa de costa consta de un vehículo lanzador Tatra T-815, con tracción 8 por 8, el cual monta de dos a cuatro tubos lanzadores. Asociado al radar Mineral-U. 

En segundo lugar, de todos ya es sabido que tanto EEUU, como el reino unido, estaban haciendo planes para dotar a ucrania de sistemas de misiles antibuque (presumiblemente estamos hablando de lanzadores terrestres de misiles Harpón, así como de otro tipo de misiles de crucero). 

Entonces, aceptando que los sistemas de misiles Ucranianos Neptuno aun no estaban operativos hasta antes del inicio de las hostilidades, y que las potencias occidentales planeaban dotar a ucrania de sistemas de defensa antibuque costera, es muy probable que hayan sido estos últimos los que golpearon al buque ruso, y los ucranianos dicen que fueron sus misiles para elevar la moral de la tropa, así como de los ciudadanos ucranianos, y quizá también para no descubrir que ya recibieron los sistemas de misiles antibuque occidentales. 

Pero como sea, estos hechos significan un duro golpe al orgullo ruso, así como a sus fuerzas armadas, pues este gran buque era el buque insignia de la flota rusa del mar negro, porque era del tipo que se conoce como mata portaviones pues entre sus armas disponía del poderoso misil antibuque Vulkán. 

El misil antibuque Vulkán tiene 11,7 metros de largo y 88 centímetros de diámetro y puede alcanzar una velocidad superior a Mach 2 y un rango de hasta 700 kilómetros. Puede ser dotado asimismo de una ojiva nuclear, que le proporcionaría una capacidad destructiva de 350 kilotones. 

El crucero de misiles Moskvá había disparado por primera vez el misil antibuque Vulkán el pasado abril (del año 2021); esta es una novedosa y potente arma desarrollada para destruir navíos de gran tamaño, incluidos portaviones; puede equipar tanto ojivas convencionales, como ojivas nucleares de hasta 350 kilotones de potencia. 

Y es aquí donde surge lo más grave del asunto, pues sí a bordo del buque iban ojivas atómicas, esto puede desencadenar un catastrófico accidente si estas sufren algún daño que deje expuesto el material radiactivo, o si llegasen a detonarse debido al fuego provocado a bordo del buque a raiz del ataque con misiles ucranianos.

Una cosa más, en el video se me olvidó mencionar que en el puerto de Odessa previamente se habían observado especialistas occidentales que estaban rastreando la ubicación de los buques rusos con aparatos especiales; rastreo que utilizarían precisamente para atacarlos posteriormente, ya sea con misiles antibuque, como los Neptuno ucranianos, o con los Harpoon estadounidenses, inclusive se manejó la posibilidad de atacarlos con misiles  balísticos del tipo  Tochka-U. Y sí, fue un error de Rusia no retirar a mayor distancia de la costa de ucrania sus buques, sobre todo sabiendo que los estaban monitoreando los miembros de la OTAN enviados para ese mismo propósito, es decir, para determinar su ubicación exacta y así dirigir los misiles agresores.  Pero como dice el refrán: De todos los errores se aprende, y esperemos que Rusia no los vuelva a cometer.



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