Una premisa que tiene el Budismo es que todos somos "dioses". El chiste es alcanzar el estado de la "Iluminación". Se supone que todo hombre vive en un estado de muerte-reencarnación, pero es posible parar este ciclo y por lo tanto el sufrimiento. Para lograrlo se debe alcanzar la Iluminación, que es el estado mental-espiritual donde obtienes todo el conocimiento de causa-efecto de tus acciones, y por lo tanto has alcanzado la perfección para acceder al "Paraíso" o "Nirvana". Es en esta condición que se supone que has alcanzado la "divinidad" plena. En el Budismo no hay adoración a ninguna deidad. La Deidad somos nosotros.
En la meditacion dejas tu mente en "blanco", repitiendo "mantras". En este estado se supone que tienes contacto con tu "yo" interno, tu "dios" interno. Pero la verdad es que al realizar esas practicas, tu le abres las puertas a seres espirituales para que ocupen tu mente. En casos extremos ocurren poseciones demoniacas.
¿Recuerdan lo que la serpiente dijo a Eva? Si comieres de ese fruto, ciertamente seréis como "dioses".
Es exactamente el mismo engaño que usa con el Budismo. Y traslapandolo a nuestra época, con la "Nueva Era", que es una continuación del Budismo tradicional.
Claro que aquellos que practican el Budismo, y no son consientes del engaño, Dios no los puede juzgar de la misma manera que a alguien que tiene el conocimiento de su palabra y aun así sigue con esas practicas. Afín de cuentas, Dios es el Juez y el decidirá quien se salva y quien no. Nosotros no somos nadie para juzgar y/o condenar.
Lo que podemos y debemos de hacer, es llevar la palabra de Dios a todos aquellos que no tienen su conocimiento.
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