El jueves, el Comando Central de EE.UU. (Centcom, por sus siglas en inglés), considerado “grupo terrorista” por Irán, comunicó que un grupo de 11 embarcaciones del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán realizó maniobras “peligrosas y amenazantes” cerca de varios buques estadounidenses en el norte del Golfo Pérsico.
En un vídeo publicado se observa que dos buques iraníes pasan frente a varios buques de guerra estadounidenses, que tocan sus bocinas en respuesta.
En otro vídeo, que se ha hecho viral en las redes sociales, se observa cómo un oficial de las fuerzas navales del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica, dirigiéndose a los soldados estadounidenses, mueve su mano como señal de advertencia mientras su barco pasa por delante del buque de guerra de EE.UU.
“Embarcaciones del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica advierten a los buques de guerra de EE.UU. y los estadounidenses no pueden hacer nada en contra de ellas”, así se ha burlado un usuario iraní en su cuenta en Twitter.
Centcom también declaró que los marines estadounidenses emitieron advertencias a los barcos iraníes, pero no recibieron respuesta. Después de aproximadamente una hora, las embarcaciones persas finalmente respondieron a los mensajes de radio y se alejaron de la zona.
En cuanto al incidente, el ministro de Defensa de Irán, el general de brigada Amir Hatami, ha considerado este viernes los alegatos estadounidenses como “afirmaciones vacuas” y ha defendido el desempeño del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica, recordando a Washington que su presencia en el Golfo Pérsico es “ilegal e invasora” y que “causa inseguridad” en esta región.
Irán comenta incidente en Golfo Pérsico: EEUU causa inseguridad
En esta misma línea, el ministro de Exteriores iraní, Mohamad Yavad Zarif, planteó el jueves la pregunta de qué hacen los buques estadounidenses a “7000 millas” de su casa. “Parece que la Fuerza Naval de Estados Unidos no puede encontrar su ruta en nuestras aguas”, aseveró.
Desde el pasado mes de julio, EE.UU. intenta, en vano, crear una coalición que vigile las vías fluviales en el estrecho de Ormuz, en el marco de su política de “máxima presión” contra Teherán para reducir a cero las exportaciones iraníes de crudo.
La República Islámica ha advertido que hará frente a todo buque extranjero que pretenda penetrar en sus aguas territoriales con dudosas intenciones. En esa misma línea, ha asegurado que el Golfo Pérsico supone una de sus líneas rojas.
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